Cómo reducir el riesgo de calibración de instrumentos de presión y temperatura en zonas con riesgo de explosión
En principio todas las instalaciones industriales son zonas peligrosas ya que se aplican numerosas sustancias inflamables en sus procesos. En algunas instalaciones del sector químico incluso cualquier chispa o sobrecalentamiento puede provocar una explosión. Para asegurar el correcto funcionamiento se realiza periódicamente una calibración de todos los manómetros y transmisores de presión.
Las exigencias que el usuario exige a un patrón portátil que se aplica en estas condiciones son muy elevadas y en gran medida determinadas por la legislación pertinente. Existen una multitud de medidas para la prevención de cualquier riesgo que dependen de la categoría del potencial de riesgo. Para prevenir cargas estáticas por ejemplo se aplica por ejemplo plásticos ABS con protección electromagnética.
Instrumentos conforme a las directivas relevantes
La idoneidad Ex de un manómetro o transmisor de presión, que denomina la aptitud de aplicaciones en zonas clasificadas, se confirma con el certificado ATEX, que se basa en la directiva 94/9/EG para la prevención de explosiones no-intencionadas en la industria. En esta directiva se estipulan todos los requisitos a calibradores equipos y componentes. Los calibradores construidos según estas directivas se someten a una prueba de examen CE de tipo. Tras su aprobación el instrumento recibe el certificado ATEX y puede utilizarse en zonas clasificadas. Las calibraciones deben realizarse exclusivamente con calibradores de seguridad intrínseca.
El exhaustivo sistema de protección se basa sobre todo en componentes electrónicos especiales. Con estos componentes se evitan la creación de chispas de ignición o temperaturas que puedan provocar un incendio. Los circuitos eléctricos poseen dispositivos para limitar la corriente y el voltaje. Así se limita la energía a un mínimo para descartar cualquier peligro de ignición incluso en caso de avería. Los calibradores de seguridad intrínseca se categorizan en los tres niveles “ia”, “ib”, “ic”. Un instrumento de la categoría “ia” indica que en caso de una avería de dos componentes críticos, un tercer componente asume su función. En el nivel “ib” existe solo un y en nivel “ic” no hay ningún componente redundante.
Selección de un instrumento adecuado
La demanda por calibradores portátiles aumenta cada vez más ya que reducen el tiempo de parada a un mínimo y permiten una calibración muy precisa in situ. Para realizar la selección adecuada hay que valorar la categoría de la zona de actuación. Según probabilidad de explosión la directiva IEC 60079-10-1 distingue entre tres tipos de áreas clasificadas:
- Zona 0: Zona con mezcla explosiva de gases, de vapores o de polvos permanente ( por ejemplo la fase gaseosa en el interior de un recipiente o de un depósito cerrado).
- Zona 1: Zona en donde la mezcla explosiva de gases , de vapores o de polvos con probabilidad de formación en servicio normal de la instalación.
- Zona 2: con mezcla explosiva de menor frecuencia o en casos determinados (fugas, averías o negligencias de utilización).
El criterio decisivo es la temperatura de ignición de la mezcla gaseosa. Por ello se han establecido 6 categorías:
- T1: temperatura de ignición >+450 ºC, máx temperatura superficial admisible en el instrumento +450 ºC
- T2: temperatura de ignición >+300 ºC hasta +450 ºC, máx temperatura superficial admisible en el instrumento +300 ºC
- T3: temperatura de ignición >+200 ºC hasta 300 ºC, máx temperatura superficial admisible en el instrumento +200 ºC
- T4: temperatura de ignición >+135 ºC hasta 200 ºC, máx temperatura superficial admisible en el instrumento +135 ºC
- T5: temperatura de ignición >+100 ºC hasta 135 ºC, máx temperatura superficial admisible en el instrumento +100 ºC
- T6: temperatura de ignición >+85 ºC hasta +100ºC , máx temperatura superficial admisible en el instrumento +85 ºC
Autor: Marco Wörner, Productmanager Calibración, WIKA, Alexander Wiegand SE & Co. KG,